Largo ha sido el camino recorrido hasta llegar a aquí… y lo que aún te queda. Si echas la vista atrás y caminas sobre tus pasos, si pones en marcha la película mental de tu vida y la reproduces a toda velocidad, si te detienes en esos momentos que han sido grabados con fuego y los vuelves a recordar…

Entonces aún podrás ver con toda nitidez a ese niño de unos tres años, llorando y corriendo por toda la habitación con la boca llena de pasta de dientes de esa que pica, porque se sentía tan mayor que quería imitar todo lo que hacían los demás, incluido lavarse los dientes.

Y seguro que aparecerán por alguna parte Pau, Elisa, Lorena y todos los demás, jugando al ‘Conejo de la Suerte’ y verás a ese niño correr detrás de las chicas para darles un beso, o escribiéndoles cartas de ‘amor’ en papeles aromáticos intercambiables.

Y poco después, ese mismo niño cambiará de casa y tendrá que ir a un nuevo colegio y hacer nuevos amigos. Y empezará a jugar a balonmano, a ganar carreras y a aprender a nadar. Y hará un playback del primer éxito de Ricky Martin junto a sus amigos Carlos, Carlos y Antonio. Le castigarán por tirar globos de agua desde la ventana de su habitación, y entre tanto dará sus primeros pasos en el amor.

Pero como uno no es dueño de su vida, pronto vendrá otra despedida: nuevo colegio y nuevos amigos. Ese niño ya habrá crecido, será de los más altos de su clase, también de los más rápidos. Entonces irá a la Granja-escuela, a parques acuáticos y se pasará las tardes jugando en la calle con Toni, Marcos, Marcos y Socri. Ahí será cuando se enamore por primera vez, y por segunda. Y empezarán los viajes a Alemania, a Viena, a Italia, siempre rodeado de grandes amigos…

Y conforme vaya creciendo y pasando cursos se irá aproximando al fin de esa etapa y el principio de una nueva. Las responsabilidades irán creciendo y también las exigencias de los estudios. Y pasará el bachiller y el selectivo y entrará en la universidad.

Allí encontrará buenos amigos, le bautizarán con el apodo de ‘cubano’ por su movimiento de caderas y llegará la casa rural y los inicios en la radio y en la televisión. Continuarán los viajes por Europa y los proyectos para saltar el ‘charco’, donde comenzará a abrir las puertas de su futuro.

Y a lo largo de esta aventura siempre estarán con él los incondicionales: Carlos, Lorena, Mariángeles, Pedro, Ángel, Jose, Fernando, Teresa, Marta, David, Iris, Albán, Dorián, Noelia, Gregory… y los padrinos y madrinas, padre, madre y hermanos, tíos, primos, abuelos y tío-abuelos, incluso una bisabuela. Y todos los que en algún momento pasaron y se fueron y los que han llegado para quedarse…

Quizá ya no se pueda decir que seas un niño, aunque muchas veces te gustaría seguir siéndolo. Y después del fugaz trayecto por todos los momentos que te han convertido en lo que hoy eres, abre los ojos y mira a tu alrededor a todas las personas que están junto a ti y que te acompañan en este momento de tu vida.

Ahora, pide un deseo y sopla con fuerza…

‘Happy birthday to you, happy birthday to you,
happy birthday mister president, happy birthday to you’
Hoy mi canción es: ‘Happy birthday’ Marilyn Monroe

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